octubre 02, 2006

Lecciones de vida

...lo común, es creer que uno las sabe todas; el orgullo demuestra carácter, pero se soporta en las debilidades propias.

Yo soy el aval de mis acciones, pero recien ahora estoy reconociendo mis límites. He emprendido proyectos muy importantes en mi vida, pero no todos han sido exitosos. El fracaso es el acento del aprendizaje.

Lo importante es resistir los golpes y saber que los dolores pasan, aunque las cicatrices de tus acciones constantemente te recuerden el error.

Emprender es el concepto; vivir con arrojo y serle fiel a la juventud. Mis verdugos han ido desapareciendo, aplastados por el peso de su proceder, sin embargo, en mi recorrer, sigo avanzando en la construcción de una pequeña huella en este mundo.
He aceptado desafíos que han sobrepasado mi capacidad, pero lo que rescato de eso no es el resultado inmediato, lo que todo el mundo puede ver o lo mal o bien parado que sali de esa situacion, lo que rescato es lo profundo que eso ha calado en mi, en forjar lo que ahora soy, en el aceptarme con humildad y ser capaz de construir un mundo mucho mas bello y, por sobre todo, aceptar la compañía que hace el complemento.
Solo puedo decir que mi orgullo me hizo impertinente, pero mi pasión reflejada en mi amor por la ciudad (Valparaíso) y por lo que hago, salvó la situación...fue tonto, pero valió la pena.

2 Comments:

Blogger Valparaisina said...

A porrazos se prende po'... unos necesitan un coscacho, otros dos...no importan cuantos sean, en algún momento el mensaje de vida queda y eso es lo importante.... tu ya lo lograste

4:35 p. m.  
Blogger vlv said...

hmmm...hay porrazos buenos y otros malos...ese q tu conoces, es un porrazo indefinido

9:01 p. m.  

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