Se llama Ana, existe
Tras una fuerte jornada de trabajo, donde se analizaba la "marcha blanca" de uno de los programas mas ambiciosos e innovadores que se puede habilitar a través del estado, referido a mejoramiento de barrios, mejoramientos de viviendas y ampliación de viviendas y donde los distintos participantes, miembros de los distintos Serviu de todas las regiones, expusieron desde su particular perspectiva las distintas dificultades y soluciones que se pueden leer tras la aplicación de éste, sentí que, a pesar de nuestro gran esfuerzo como región (esta vez, la de O'higgins, no la de Valparaíso...), no habiamos logrado instalar nuestro objetivo, nuestra postura frente al programa.
Pero bueno, cuando todo esta oscuro, siempre llega alguien que prende la luz...esa es su pega; tuve la oportunidad de escuchar palabras que se dijeron con absoluto convencimiento, con absoluta claridad respecto de los objetivos que perseguimos, con absoluta claridad de quienes son las personas de las que estamos hablando y que, por sobre todo, lograron reafirmar la idea sobre como yo, a pesar de mi distancia jerarquica, a pesar de mi anonimato, estoy llamado a convertirme en pieza clave del exito de este objetivo...
Hace un tiempo atras, de una manera extraña, que no se bien como explicar, conocí a la Ana, una persona que me dió y me sigue dando tremendas lecciones de vida. A pesar que ella era tachada como la loca del pueblo, de extraño vestir, dueña de un titulo popular de bruja y curandera, habitante de la mas terrible media agua, criadora de perros abandonados que, por supuesto, comían mejor que ella y que a través de sus ojos cansados me mostró la pobreza extrema, la discriminación, el abuso y que tambien, gracias a su espiritu, conocí la fé ciega que la sostiene, fé en algo que ni yo estoy seguro que pueda ser cierto y ella lo sabía...conocí la alegría absoluta y sincera de vivir...solo de vivir.
Gracias al cariño que siento por esta "vieja fea", gracias a que mis padres me amaron y me criaron como lo hicieron, gracias a las no pocas extrañas circunstancias que han marcado mi vida, hoy soy capaz de pararme y transmitir, con toda sinceridad, un mensaje en el que creo, principios que han sido parte de mi toda la vida...porque es cuando logras transparentar tu persona, cuando logras sincerar tus afectos y planteas tu postura frente a la vida, libre de toda distorsión cuando se produce el momento clave en que la gente confía en ti, deja de tener miedo o resentimiento, se saca la mano de la cara y se hace parte de tu vida.
Hoy le debo mi lealtad a una causa, hoy tengo un COMPROMISO.